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Antes de comenzar a sembrar el césped en nuestro jardín, es importante preparar adecuadamente el terreno para asegurarnos de que el césped crezca fuerte y saludable. En lo que sigue, te vamos a resumir algunos consejos útiles sobre cómo preparar el terreno para el césped como verdaderos profesionales.
Con nuestra experiencia en el cuidado del césped, hemos aprendido que la preparación adecuada del terreno es clave para lograr un jardín exuberante y hermoso a largo plazo, así es que ten claro que todo el esfuerzo que hagas ahora significará un ahorro de tiempo de cara al futuro.
Sigue leyendo para descubrir nuestros «trucos» para preparar el terreno antes de sembrar el césped.
Preparación del terreno para sembrar césped en 7 pasos
Si estás pensando en sembrar césped en tu jardín, es importante que sepas cómo preparar el terreno para sembrar césped adecuadamente. Para ello, hemos recopilado los siguientes 7 pasos que te ayudarán a conseguir un terreno apto para sembrar un césped tupido, sano y hermoso en pocas semanas.
A continuación, te dejamos los 7 pasos para preparar el terreno para sembrar césped:
1. Eliminar las malas hierbas
Antes de empezar a sembrar el césped, a la hora de preparar el terreno, es importante eliminar las malas hierbas que puedan estar en la zona. Una forma efectiva de hacerlo es regando la zona a diario durante dos semanas. De esta manera, podrás identificar las malas hierbas que han germinado y eliminarlas fácilmente.
Si ha llovido abundantemente y los últimos días ha salido el sol (la situación típica a finales del invierno o comienzo de la primavera), te lo puedes ahorrar.
Por cierto, aunque uses herramientas de corte o tu desbrozadora para las ramas gruesas, no te quedará otro remedio que hacer uso de las manos y de la pala, si quieres asegurarte de que todo queda bien.
Usa un extractor de malas hierbas, pero en la medida de lo posible, te recomendamos que evites usar herbicidas, pues pueden afectar al futuro crecimiento del césped.
2. Labrar la superficie
Después de haber eliminado las malas hierbas, es importante labrar la superficie para descompactar la tierra y mejorar su oxigenación y humedad y prepararla para la futura siembra de césped.
El labrado debe tener una profundidad de entre 20 y 30 centímetros para favorecer la actividad de los microorganismos que fijan el nitrógeno al suelo. Además, el labrado te permitirá identificar piedras o raíces que deban ser retiradas.
Para hacerlo, puedes usar una horca de cavar o tridente, pisando con los dientes clavados en la tierra y levantando la tierra con un giro del palo hacia atrás.
3. Planificar el drenaje
Para evitar que el agua se acumule en la superficie después del riego, es importante planificar el drenaje. Analiza cuidadosamente las zonas que quedan bajo pendiente y procura nivelar la superficie lo máximo posible antes de la siembra y el riego.
Si hay zonas que no puedes evitar que queden más bajas que otras, procura que estas últimas posean un sistema para evacuar el agua sobrante.
De todas formas, el drenaje va a depender también en buena medida del paso anterior, de hasta qué punto consigas descompactar la tierra y eliminar las piedras que hay bajo el sustrato.
4. Instalar el método de riego
Una vez eliminadas las malas hierbas y labrado el terreno, el riego es fundamental para preparar la tierra antes de sembrar el césped. A la hora de instalar el método de riego puedes optar por regar manualmente o con un sistema automático. Este último aporta la cantidad de agua necesaria para que el césped se mantenga sano y no se ahogue.
Has de tener en cuenta cuál es el mejor horario de riego. Si optas por un sistema automático, es recomendable que sea instalado por profesionales. Después de los primeros riegos, no está demás pasar el rastrillo para volver a oxigenar la tierra y evitar que vuelva a compactarse.
5. Incorporar el sustrato
Si el terreno es pobre, puedes utilizar un sustrato orgánico para aportar nutrientes y mejorar la absorción del agua. Si el suelo tiende a encharcarse, la enmienda que puedes utilizar es la arena. Estos elementos también te pueden ayudar a rellenar huecos o desniveles que hayan quedado.
Seguidamente, te mostramos una selección de sustrato para el césped:
6. Abonar la tierra
El abono es importante para el crecimiento del césped. Según el tipo de césped que quieras sembrar, para abonar la tierra puedes utilizar un fertilizante u otro. Es importante que sigas las instrucciones del fabricante y no excedas la cantidad recomendada.
7. Nivelar la tierra
Y por último, antes de sembrar el césped, es importante nivelar la superficie con un rastrillo para quitar los residuos que se hayan quedado durante el proceso. De esta forma, conseguirás una superficie uniforme y lista para la siembra.
Siguiendo estos 7 pasos, estarás preparando el terreno adecuadamente para sembrar el césped en tu jardín. ¡Pronto podrás disfrutar de un césped verde y hermoso!
Qué otras cosas debo hacer antes de sembrar césped
Hay dos cosas que nos parece básico conocer antes de sembrar el césped:
- La primera es conocer los diferentes tipos de césped que existen, para decidirse por uno u otro en función de las variables de clima y uso, fundamentalmente.
- La segunda es informarse sobre la mejor época del año para sembrar el césped, pues cada tipo de césped te va a pedir una fecha diferente para siembra, y éste es un aspecto que hay que respetar.
Una vez que tengas claro estos dos puntos, estarás listo para sembrar césped en tu parcela o jardín.
Cómo sembrar césped una vez preparado el terreno
Aunque tenemos un artículo dedicado en exclusiva al tema de cómo sembrar césped, vamos a hacer un resumen por si quieres darle sólo un repaso o quieres ir al grano.
Una vez que hayas preparado el terreno para sembrar césped, puedes seguir estos pasos para asegurarte de que la siembra sea exitosa:
- Elige la semilla adecuada: Selecciona un tipo de semilla de césped que sea adecuado para tu clima, el uso previsto del césped y las condiciones de la zona (como la cantidad de sol y sombra).
- Calcula la cantidad necesaria: Determina la cantidad de semilla que necesitarás basándote en las recomendaciones del fabricante y el área de superficie que deseas cubrir.
- Divide la semilla: Para asegurar una cobertura uniforme, divide la semilla en dos partes iguales. Una parte se sembrará en una dirección y la otra en una dirección perpendicular.
- Esparce la semilla: Usa un esparcidor de semillas para distribuir la semilla uniformemente sobre el área. Comienza esparciendo una mitad de la semilla en líneas paralelas a lo largo del terreno. Luego, esparce la otra mitad en líneas que crucen las primeras en un ángulo de 90 grados.
- Ligera incorporación: Después de esparcir la semilla, usa un rastrillo para mezclar ligeramente la semilla con las primeras pulgadas de tierra. Esto ayuda a asegurar el contacto entre la semilla y el suelo y a protegerla de los pájaros.
- Compactación ligera del suelo: Pasar suavemente un rodillo de césped sobre el área sembrada puede ayudar a mejorar el contacto entre las semillas y el suelo, lo cual es crucial para una buena germinación.
- Riego: Riega la zona con delicadeza para humedecer el suelo sin lavar las semillas. Mantén el suelo constantemente húmedo pero no empapado, lo que puede requerir riegos ligeros varias veces al día, especialmente si el clima es cálido y seco.
- Mantenimiento post-siembra: Evita caminar sobre el área sembrada hasta que el césped esté bien establecido. Puede ser necesario aplicar un fertilizante de inicio para proporcionar los nutrientes necesarios para el crecimiento de las plántulas.
- Primer corte: Cuando el césped alcance una altura de aproximadamente 7-10 centímetros, puedes realizar el primer corte, asegurándote de no quitar más de un tercio de la altura de la hierba para evitar el estrés.
- Observación y cuidado continuo: Monitorea el crecimiento y la aparición de malas hierbas. Puede ser necesario realizar resiembras en áreas donde la semilla no germinó bien.
Recuerda que la época del año es importante para sembrar el césped; generalmente, el otoño es el mejor momento para sembrar césped de estación fría, mientras que la primavera es preferible para césped de estación cálida. Sin embargo, esto puede variar según las condiciones climáticas locales.
Las semillas de césped más vendidas de 2024
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Recuerda que, antes de optar por una de ellas debes comprobar qué semillas de césped son las más adecuadas para tu jardín según la ubicación, clima y uso que se le vaya a dar.
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